En lo que va del año, el Instituto de Cultura del Chaco viene implementando el Fondo Provincial Solidario, en el marco de la ley N° 1353-E, Ley de Fomento de la Actividad Privada en Actividades Culturales (Mecenazgo). Se trata de una herramienta financiera que sirve para que artistas y hacedores chaqueños lleven adelante sus iniciativas, como forma de ayudar a paliar la crisis que implicó el aislamiento social obligatorio. La propuesta forma parte del programa Impulsar Cultura, dedicado especialmente a promover herramientas de financiamiento para el desarrollo cultural.
En la primera convocatoria de 2020, fueron seleccionados 60 proyectos culturales de distintos puntos del territorio provincial. Los beneficiarios recibirán entre 30 y 50 mil pesos para desarrollar propuestas artísticas y culturales con impacto en la comunidad. Cada propuesta, con su particularidad y público concreto, apunta a mitigar los efectos adversos de la crisis sanitaria y a acompañar a la sociedad desde los hogares en el marco de la Cultura del Cuidado.
En cuanto a proyectos que se encuentran en curso, vale destacar Expresate desde el arte, coordinado por Josefina Lucia Salvay, y Aprendemos y sentimos a la danza virtualmente, coordinado por Verónica Haydee Ramírez.
“Desde el inicio del aislamiento social obligatorio, con nuestros equipos de trabajo llevamos adelante líneas de acción concretas. Trabajamos arduamente para que miles de hacedores culturales en nuestra provincia no interrumpan sus actividades”, señaló la presidenta del Instituto de Cultura, Mariela Quirós.
Expresate desde el arte
Este proyecto propone el dictado de clases de dibujo y pintura en formato online y busca desarrollar y estimular la capacidad creadora. Actualmente tiene 17 alumnas y alumnos, entre niñas, niños, adolescentes y adultos. Están divididos en diferentes grupos, y el cupo máximo de cada grupo es de 8 alumnos, quienes pueden optar entre encuentros virtuales o videos tutoriales.
Respecto a lo que implica enseñar arte de manera virtual en el contexto de una pandemia mundial, Josefina Salvay dijo: “significa reinventarnos, sobre todo porque el arte es expresión de todos los sentidos y no es una tarea simple acompañar y guiar esa expresión a través de una pantalla. Pero también es verdad que – con el aislamiento social que estamos viviendo – el desarrollo de las capacidades creadoras es fundamental para que niñes, adolescentes y adultes puedan exteriorizar emociones y sentimientos. A veces se necesita una guía o un acompañamiento para poder hacerlo”.
La modalidad de enseñanza virtual para muchos docentes fue una imposición, el descontento se hizo sentir en todos los ámbitos, pero en el caso de este proyecto específico, la coordinadora explicó: “si algo nos dio de positivo esta situación, es el poder ver un poco más allá de nosotres, saber que en algunos pueblos, en algunos lugares del país, no cuentan con el recurso humano para poder realizar estos talleres. Creo que esta propuesta podría mantenerse en el tiempo, sobre todo para acompañar y guiar. Con este proyecto buscamos acompañar a la persona para que pueda buscar adentro suyo, que pueda ahondar en sus emociones para expresar lo que siente, guiándola para que lo haga con su estilo, sin copias. Buscamos que todes sepan que son capaces de crear y expresarse”.
De este proyecto pueden participar todas las personas mayores a 6 años (niños, adolescentes y adultos), con o sin experiencia previa. Para más información escribir al correo contacto@empoderar.com.ar o contactarse al 3775- 410555.
Bailar y sentir
Aprendemos y sentimos a la danza virtualmente consiste en clases de folclore, malambo y danzas litoraleñas. Para ello, los docentes realizan vídeos tutoriales didácticos que hacen llegar vía WhatsApp a todo aquel que no pueda acceder a otra red. Estos tutoriales también son cargados a Facebook y YouTube.
“Estamos aprendiendo juntos y de eso se trata, de poner todo de sí para que el alumno y la alumna pueda aprender. Nunca imaginamos que íbamos a pasar por esto, pero todo nos deja una enseñanza. Poder trabajar de forma virtual y estar conectados nos da un motivo para no caer en el cierre y el desinterés. Esta modalidad nos ayudará a reforzar nuestras clases y capacitarnos con profes de todo el país; a través de lo virtual también podemos conectarnos, ya que a veces las condiciones económicas no nos permitían traer un profe del sur por ejemplo”, expresó Verónica Haydee Ramírez.
Antes de la pandemia, Aprendemos y sentimos a la danza tenía 50 alumnos; ahora son menos, pero el interés va creciendo. “No todos tienen alcance a internet, a tener un wifi en casa, y entonces cargar crédito se complica mucho. En mi caso, que enseño danzas de pareja enlazada, los alumnos deben bailar solos. No es una tarea fácil, pero le vamos encontrando sus fortalezas”, contó.
El proyecto cuenta con una etapa de iniciación y otra de producción final, donde se evaluará lo que aprendieron a través de la presentación de producciones como bailar un gato, un rasguido o marcar una danza. Está dirigido a distintos niveles: iniciales (de 5 a 7 años), adolescentes, adultos principiantes y bailarines avanzados. Para más información escribir a veroramirez1224@gmail.com, o por teléfono al 3734- 415088.
Debe estar conectado para enviar un comentario.