“El frente del Museo es la cultura inmaculada, la parte posterior el vandalismo y tierra de nadie, total nadie los ve cuando barretean puertas históricas y saquean”, con esas palabras inicia una nota de descargo la directora del Museo de Ciencias Naturales “Augusto G. Schulz”, María Angélica Ferrari, para expresar el desagrado y la reprobación de los continuos robos al organismo cultural.
El festejo del 51° cumpleaños del Museo de Ciencias Naturales conmemorado el pasado 25 de mayo, se vio empañado nuevamente “por la acción de vándalos que se han empeñado en saquear la institución rompiendo con barretas las puertas históricas del edificio Monumento Histórico Nacional, vidrios, violentando armarios y llevando todo lo que encontraron a su alcance”, señaló el directivo ante la comprobación el domingo pasado de que habían ingresado por la fuerza al Museo y sustraído herramientas de trabajo.
“Indignación total de los trabajadores del Museo, que con mucho esfuerzo vinimos juntando monedas, en un trabajo de hormiga, y fuimos comprando los elementos para poder trabajar, incluso completando en forma particular y pagando el valor que aun faltaba para adquirir elementos de trabajo indispensables”, indicó. “Así se adquirió un proyector en pantalla gigante para el desarrollo de actividades educativas, una desmalezadora para mantenimiento del jardín botánico”, especificó y sentenció que debieron recurrir a ese sistema de compras “porque el Instituto de Cultura nunca nos proveyó lo que necesitábamos, argumentando que no pueden comprar para cada museo, por motivos económicos o por la modalidad burocrática de trabajo del sistema”. “También adquirimos impresora, aspiradora, sopladora de hojas entre otros elementos”, agregaron.
El robo produjo roturas de puertas, vidrios, con sustracción de elementos de jardinería, herramientas básicas, y encontraron preparadas también importantes piezas museológicas para ser llevadas y que componen el fondo patrimonial cultural natural del museo, “un patrimonio de todos los chaqueños”, afirmó.
La directora a cargo del Museo reflexionó al respecto y solicitó a las autoridades culturales que reparen del edificio, y provean de “equipamientos correspondiente a la importancia de este museo que ha retrocedido notablemente en los últimos años por la falta de interés por las ciencias”.
El primer saqueo sufrido el 2 de mayo y la última el pasado domingo 29, “muestra claramente la urgente necesidad de reponer alarmas mil veces pedidas y prometidas”, reafirmó “así como poner cámaras de vigilancia y sereno o custodia permanente”.
El edificio de la ex Estación Santa Fe donde funciona el museo y que es Monumento Nacional , “está muy expuesto y sin protección ni custodia de gendarmería o policial, como sería lo correcto”, concluyó. Tiene doce aberturas solamente en las galerías laterales y posteriores, y nueve en el frente del edificio.