Para ello, los jefes de cada planta comunican a los centros de distribución y al laboratorio las tareas que se llevarán adelante con fecha y horario para que se tomen las medidas necesarias y no se afecte el servicio. “Empezar a cargar todas las cisternas el día anterior para que todas estén a su máxima capacidad de manera que no se afecte el servicio”, indicó el jefe de la planta potabilizadora N°2 Gustavo López.
La planta N° 2 contiene cinco decantadores y el vaciado del decantador a trabajar, la limpieza y la posterior recarga para que continúe con el proceso de potabilización normalizando el caudal llevó unas tres horas. La ejecución del trabajo lleva como mínimo 10 personas con el equipo adecuado y medidas de seguridad correspondientes.
La planta potabilizadora N°3 también tuvo un saneamiento completo y el servicio no se interrumpió en ningún momento. Los operativos contaron con ocho operarios y tuvieron una duración aproximada de cinco horas en cada decantador. “Los trabajos en los decantadores se realizan cada cuatro meses, tres veces por año, y consisten en la limpieza de los decantadores de la planta con el personal, agentes del área de electromecánica y del área de taller”, concluyó el jefe de la planta Rubén Molina.
