Lo afirmó el (todavía) jefe de la Policía del Chaco, Fernando Romero, en declaraciones a Radio Independencia, a 24 horas de presentar su renuncia junto a otros dos mandos de la fuerza, que también estarían cumpliendo funciones.
En diálogo con el programa “Hasta Las Manos”, Romero afirmó que “por el momento sigo transitoriamente en el cargo. La señora ministra me enviado un oficio pidiéndome que me mantenga en el cargo y en funciones hasta que se resuelva la situación administrativa de mi renuncia”, advirtió Romero.
Hay que recordar que el subjefe Ángel Domínguez y Mariela Noemí Aguirre, directora ejecutiva del Centro de Análisis, Comando y Control Policial (C.E.A.C), también renunciaron a sus cargos.
La cuerda comenzó a tensarse cuando el jefe de la Policía no logró sacar de la pasividad a los 4 efectivos imputados en la causa por violencia institucional en Fontana. Es decir, por decisión de la ministra de Seguridad, Gloria Zalazar, estos 4 policías siguen desafectados cobrando el 50% de sus sueldos. Así es que Romero apela a la coherencia, al afirmar que hay otros 900 policías en la misma situación y deberían correr la misma suerte que los 4 en cuestión.
En la noche del lunes, los familiares de los efectivos desplazados se manifestaron en la avenida 25 de Mayo, a la altura de la jefatura de la Policía, en apoyo a la cúpula policial.
Se sabe que la jueza de Garantías Rosalía Zozzoli hace días dictó el cese de prisión para el oficial subayudante Cristian Eduardo Foschiatti, del sargento Cristian Omar Benítez, del cabo Cristian Ariel Flores y del agente Orlando Sergio Cabrera, los cuales están acusados de “vejaciones en concurso real con allanamiento ilegal”.
Fuente: Radio Independencia y Diario Norte
