En 1935 un grupo de intelectuales entre ellos Arturo Jauretche, Homero Manzi, Juan B. Fleitas, Luis Dellepiane, Gabriel del Mazo y Raúl Scalabrini Ortiz- decidieron apartarse del Partido Radical y formar FORJA, un movimiento ideológico que intentó recuperar las ideas de Hipólito Yrigoyen y levantar las banderas de la defensa de la soberanía nacional.
En el accionar de la agrupación y sus dirigentes se destacaban sus postulados ideológicos y la militancia opositora a los gobiernos conservadores de los años treinta. Los forjistas alzaron sus voces denunciando una época infame, caracterizada por el impacto económico de la Gran Depresión, el fraude y la corrupción política.
FORJA desplegó su acción a través de sus publicaciones, de las cuales los más destacados fueron los Cuadernos de FORJA. En ellos, se publicaron manifiestos sobre el pensamiento de Yrigoyen y artículos en los que se denunciaban las políticas del gobierno conservador hacia los servicios públicos y el transporte y, asociados con estos, algunos ensayos en los que se denunciaba la acción del imperialismo inglés en la Argentina. Encabezadas por la frase “Somos una Argentina colonial; queremos ser una Argentina Libre”, sus declaraciones dirigían críticas a las autoridades partidarias radicales por desviarse de los lineamientos históricos establecidos por Yrigoyen y denunciaban al gobierno de Agustín P. Justo, caracterizándolo como una “dictadura política”, expresión de las “oligarquías gobernantes” y su plan sistemático para limitar la soberanía del pueblo.
Ellos defendían la firme convicción de que, nuestra lucha de argentinos debe ser doble: contra el enemigo extranjero que invade y contra el enemigo de dentro que entrega.
Tras la irrupción del peronismo, la agrupación acompaña las importantes medidas de nacionalismo económico y justicia social implementadas. El movimiento se disuelve el 15 de diciembre de 1945 para integrarse a “la Revolución nacional en marcha”, es decir al movimiento peronista considerando que el pensamiento y las finalidades perseguidas al crearse FORJA están cumplidas al definirse un movimiento popular en condiciones políticas y sociales.
FORJA fue un movimiento de intelectuales, minoritario en el seno del partido radical, pero sus resonancias doctrinales y la influencia de los hombres que participaron en él, fueron profundas.
Como militantes políticos, nos enorgullece pertenecer a este espacio, en el cual desde sus orígenes tuvo una postura intransigente frente a la oligarquía y el imperialismo, defendiendo un modelo de país nacionalista, federal y con justicia social. Hoy, desde FORJA, como hace 86 años, seguimos levantando las mismas banderas de libertad e igualdad para todos los argentinos.