Los partidos opositores de Brasil pidieron este martes al fiscal general, Augusto Aras, abrir una investigación contra el presidente Jair Bolsonaro por “exhortar al odio” contra rivales políticos, en virtud del asesinato de un dirigente del Partido de los Trabajadores por parte de un policía penitenciario bolsonarista en Foz do Iguazú, estado sureño de Paraná, el pasado sábado.
“Bolsonaro usa su posición de autoridad para diseminar odio”, dice el pedido que indica que el jefe del estado debe ser investigado por incitación y apología del crimen.
El pedido fue elevado por el Partido de los Trabajadores y sus aliados que impulsan la candidatura opositora del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva para las elecciones del 2 de ocrtubre más el Partido Democrático Laborista, del candidato presidente Ciro Gomes.
El pedido se basa en las recurrentes convocatorias a una “guerra” contra la oposición y sus amenazas contra sus adversarios políticos.
Vinculan los discursos de Bolsonaro por Facebook y en videos para sus seguidores al clima de odio generado en el país y que terminó el sábado con la vida de Marcelo Arruda, tesorero del Partido de los Trabajadores (PT) asesinado por Jorge Guaranho, un policía y activista del presidente que irrumpió en la fiesta de cumpleaños de la víctima y lo mató de tres tiros por cuestiones políticas.
El presidente Bolsonaro acusó este martes a los que se defendieron de la agresión de haber reprimido con fuerza Guaranho con patadas en la cabeza luego de haber asesinado a Arruda.
El bolsonarista está internado y detenido por homicidio.
Luego de acusar a la izquierda por la violencia, Bolsonaro invitó este martes a Brasilia a uno de los hermanos de Arruda, aparentemente crítico de una parte de la familia, que trabaja en la central hidroeléctrica brasileño-paraguaya de Itaipú, que depende del gobierno federal.
Bolsonaro le dijo a José Arruda que “la izquierda politizó el caso” y que el homicida “era un desequilibrado”.
La reacción de Bolsonaro ocurrió luego de que sus aliados le recomendaron, según la prensa, tener mayor empatía con el homicidio contra un hombre que festejba su cumpleaños con una remera con la cara de Lula. Fuente: Télam
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