Hace 65 años nuestro territorio se constituyó como provincia, a partir de una fuerte decisión política de nuestro movimiento justicialista, y gracias a quienes vieron las potencialidades de nuestro suelo. En ese entonces nos otorgaron la posibilidad de crecer como provincia autónoma bajo el sistema democrático y una concepción federal, que hoy debemos reivindicar más que nunca.
Grandes hombres como el compañero Felipe Gallardo fueron los grandes propulsores de este proyecto y Eva Duarte de Perón fue la que abrió el camino para que hoy seamos una provincia soberana, que se caracteriza por su gran diversidad cultural y por un suelo con mucha riqueza natural. La provincialización fue un reconocimiento a la potencialidad de este suelo, que hoy debemos seguir reforzándola. Muchos hombres y mujeres son parte de la historia de esta provincia que aún se esfuerza por seguir creciendo y por demostrar al resto del país y el mundo que tenemos cosas importantes para aportar.
El Chaco tiene una ubicación estratégica en el centro del corredor bioceánico que nos posiciona como potencial productivo e industrial, pero además cuenta con un capital humano valioso que es fruto de la diversidad cultural que se nutre de ancestros inmigrantes y de nuestros pueblos originarios. Esto es lo que nos hace únicos y es lo que debemos defender e impulsar con orgullo.
La unidad de lo diverso y la búsqueda de lo colectivo debe ser nuestra bandera como chaqueños. Debemos respetar a todos los hermanos que conforman nuestro suelo y trabajar juntos por el crecimiento de cada pueblo. Dios nos dio un suelo bendito, y de nosotros depende construir un Chaco próspero y con mayores oportunidades para todos.
Es necesario también dar un fuerte impulso a nuestra identidad como pueblo. Debemos revalorizar lo que nos identifica y reivindicar nuestro patrimonio natural, histórico, cultural y turístico; construir una provincia que incluya a todos y en donde cada chaqueño tenga oportunidades de crecer, en el lugar donde quiera vivir.
En este sentido, hoy más que nunca debemos continuar la lucha por el verdadero federalismo y defender los derechos indelegables que tenemos como provincia como la distribución justa y equitativa de los recursos fiscales, para garantizar un crecimiento equiparado y que el desarrollo llegue a cada chaqueño.
Hoy tenemos un presente que nos enorgullece por todas las cosas que hemos alcanzado. Sabemos que aún hay cosas que faltan y es por lo que tenemos que seguir trabajando. El futuro nos desafía a seguir creciendo en lo social, lo económico, lo educativo, para bregar por ser una potencia agroalimentaria con perfil industrial.
Hace 65 años era difícil imaginar que lograríamos todos los sueños que hemos alcanzado, con escuelas, viviendas y hospitales, agua potable, gas, energía eléctrica y red de fibra óptica, en distintos puntos del territorio provincial. Hoy tenemos la alegría de ser una provincia en constante crecimiento, con estas obras que alcanzan cada vez a más chaqueños. Sabemos que es mucho lo que falta, pero también que, si seguimos juntos sin bajar los brazos, en estos tiempos tan difíciles tendremos un gran futuro por delante.
Por Domingo Peppo
