Con casi la totalidad de las mesas escrutadas, Cambiemos se imponía en 13 provincias, y el justicialismo en 9. En tanto, en dos provincias (La Pampa y Tierra del Fuego) la elección se mostraba muy peleada, resultando en un empate técnico por la ajustada diferencia que no alcanzaba el punto porcentual
Con esos triunfos territoriales, Cambiemos ganó 19 bancas a nivel nacional, y así, el interbloque Cambiemos se consolidará a partir del 10 de diciembre como primera fuerza de la Cámara de Diputados, con 108 diputados entre propios y aliados, de acuerdo a los resultados provisorios de las elecciones en las que se pusieron en juego la mitad de las bancas del cuerpo.
En tanto en el Senado, el bloque oficialista Cambiemos obtuvo nueve bancas más de las que ponía en juego en las elecciones legislativas para renovar un tercio de la Cámara de Senadores, y logró quitarle la mayoría absoluta al peronismo, que perdió diez escaños.
Agua y ajo
Con estos nuevos números en la composición del Congreso, el presidente Mauricio Macri anunció este lunes que convocará a gobernadores, intendentes, gremios, Congreso y Justicia para que juntos, en base al diálogo, se encaren las reformas necesarias y que aún están pendientes para que toda la gente tenga “las herramientas que le permitan desarrollarse”, y “quien se levanta temprano todos los días sienta que puede proyectarse” y no se beneficie al que “hace trampa y saca ventaja”. Es decir, comenzará el debate por la reforma laboral y a juzgar por el espejo de Brasil, cercenará derechos laborales afectando a las clases populares, en beneficio del empresariado. Todo, sin los aumentos tarifarios ya estipulados y el ajuste que plantea el presupuesto 2018 con una importante restricción del gasto social.
