Chaco mira con preocupación, pero ya sin asombro, su “privilegiada” posición en el ranking de jurisdicciones argentinas con más casos positivos de Covid 19, como así también fallecimientos por la enfermedad.
Y en la recta, el final no parece acercarse. Al contrario, se espera hacer cuesta arriba el temible “pico” de la montaña que comenzamos a subir allá por principio de marzo. O al menos así lo deja entrever el doctor Daniel Merino, médico especialista en enfermedades infecciosas y con vasta experiencia, quien, en una entrevista con Diario Norte, brindó su análisis de la situación epidemiológica que atraviesa actualmente la provincia.
En principio, Merino consideró que, de alguna manera, los primeros casos no fueron bloqueados a tiempo, “y posiblemente tampoco se hizo un seguimiento estricto de todos los casos contactos de los primeros pacientes”, agregó. Respecto a esto, el médico comparó este “mal primer paso”, diciendo que lo mismo ocurre con el dengue.
“Cuando se dejan entran los primeros casos sin el debido control, y no se analizan los contactos y hasta donde llegó la transmisión, después se hace una curva bastante difícil de controlar, y es cuando se complica”, explicó Merino.
Con más de 1100 casos hasta el momento y el 10 por ciento del total de fallecimientos en el plano nacional, para el doctor Merino la cantidad de infectados en la provincia “exige moverse rápidamente”. Bajo este panorama, el especialista sostuvo que las medidas adoptadas por el Ejecutivo provincial son correctas en cuanto al seguimiento de testeos, e indicó que los mismos deben realizarse no solamente los que tienen sintomatologías “sino también aquellos que pueden ser por contacto, que es la mejor forma de controlar”, recordando además que el Covid-19 se transmite por grupos.
“Esta enfermedad se transmite entre compañeros de trabajo, en la familia, en los barrios, se mueve entre grupos de personas”, remarcó Merino, y añadió que “la idea de bloquear los barrios es acertada, pero el panorama es complejo, hay que seguir cada caso”.
Por otra parte, el médico bregó por la protección del personal de salud. “No debemos ser víctimas de todo esto, porque en la vorágine de tratar de salvar la situación, puede haber algún descuido que signifique un riesgo potencial para el personal de sanidad”, expresó.
“EL PICO DE CONTAGIOS TODAVÍA NO LLEGÓ”
El experto en epidemiología sostuvo que el Gran Resistencia aún no llegó al punto máximo de circulación viral, pero a pesar de eso manifestó que la situación puede empeorar si no se toman los recaudos correspondientes. “Por tratarse de un virus de afectación respiratoria del cual no hay cura, la cantidad de casos es una curva muy difícil de parar porque los impactos vienen por varios lados”, manifestó Merino, diciendo que “no es lo mismo que tengas que cuidarte de cien infectados a que tengas que cuidarte de mil”.
Sobre esto, el médico afirmó que debe aumentar la cantidad de testeos diarios, ya que considera que la cantidad de infectados es mayor a las cifras oficiales. “Tenemos una información parcial de la situación. Ya pasaron tres meses y estamos viendo una explosión importante”, dijo al respecto, señalando que una mayor cantidad de casos “significará más cantidad de fallecidos”.
IDENTIFICAR LAS ZONAS DE RIESGO
Merino asegura que por intermedio de los testeos masivos se pueden obtener datos certeros para controlar la circulación.
“Cuando se tenga un perfil de dónde se está moviendo más la circulación viral, hay que afirmar el esfuerzo ahí”, remarcó el especialista, añadiendo que “no se puede generar defensa para toda la población, hay que identificar a los más expuestos, los que tuvieron contacto con casos críticos”. En este sentido, el doctor aseguró que “lo ideal es que cada enfermo tenga posibilidad de infectar a una persona. Pero cuando es a dos o tres, como ha pasado, se vuelve incontrolable”.
En base a su experiencia, Merino ratificó que se debe incrementar la cantidad de testeos. “Hemos estudiado muchas enfermedades y a veces se descubre una gran cantidad de casos, pero no porque hay un pico de epidemia sino porque los estudiamos más. Pero si no se investiga uno cree que no hay nada, y no es así”.
“LOS TESTEOS MASIVOS NOS DIRÁN DÓNDE ESTAMOS PARADOS”
Una de las dificultades señaladas por el experto refiere a la persona portadora, “que anda deambulando y expone a los demás”. Sobre esto, Merino señaló que “hay que tener un manejo epidemiológico muy estricto”, e indicó que se debe hacer un comité de infectología y un seguimiento y aislamiento estricto en cada caso.
Cuando se le consultó sobre una posible fecha límite para la pandemia, Merino expresó que la misma puede llegar cuando una buena parte de la población haya adquirido los anticuerpos naturales que eliminan el virus. “Hay una gran cantidad de gente que no se entera que estuvo en contacto con una persona portadora y se contagió. Esa persona adquiere anticuerpos. Cuando haya un porcentaje importante de población que haya pasado por esto, la curva de contagios bajará drásticamente. Pero eso solo lo sabremos con los testeos. Sin eso no hay forma de saberlo. Estamos en una situación problemática, pero esto puede expandirse mucho más”, finalizó. Fuente: Diario Norte
